Las movidas del alcalde de Medellín para desviar acusaciones de violencia sexual

La última de las llamadas que el alcalde de Medellín Daniel Quintero le hizo el sábado 20 de junio a Fidel Cano, director del diario El Espectador, incluyó una advertencia: “Me dijo que había decidido dejar todo en manos de su abogada y que teníamos libertad de publicar, pero podíamos ser sujetos de acciones legales si dañábamos su reputación. Solo le dije que ese era su derecho y la columna salió sin quitarle una coma”.

La columna que menciona Cano es El silencio del alcalde de Medellín frente a denuncias de violencia sexual que lo señalan, firmada por Mariángela Urbina y Viviana Bohórquez, creadoras del espacio de opinión Las Igualadas. Fue la primera publicación en medios de comunicación sobre dos señalamientos de agresiones sexuales que habrían sido cometidas por el alcalde Quintero en 2016 y que salieron a la luz pública días antes en redes sociales: la primera el 16 de junio y otra más, de una mujer distinta, al día siguiente. 

Cano dice que no era la primera vez que hablaba con el alcalde de Medellín, pero que no recuerda que antes lo hubiera llamado a preguntar por algún tema en investigación y que, con seguridad, en ninguna de las conversaciones previas Quintero había estado tan afanado como ese día. 

Aunque la columna de Las Igualadas no se centra en los hechos denunciados sino en la negativa del alcalde y su equipo a ofrecer una respuesta ante las acusaciones, podría ser un punto clave para comprender una estrategia para acallar el tema, que pasa no solo por las llamadas del mandatario al director de El Espectador, sino también por otras presiones a los medios, la negativa de Quintero y de sus subalternos a entregar una respuesta oficial a periodistas que preguntaron por esos casos y el amedrentamiento en redes sociales anunciando medidas contra supuestas denuncias falsas ante hechos similares. También por hacer señalamientos contra algunas de las periodistas que investigan el tema y proponer publicaciones e incluso pauta publicitaria en medios de comunicación para imponer la imagen del alcalde como un padre y esposo ejemplar.

“Un ataque político”

Las acusaciones de violencia sexual por parte de Quintero comenzaron con un hilo en Twitter publicado el 16 de junio en la cuenta @dontfindme96. Fueron 13 trinos en los que una mujer describía un abuso que, según su versión, ocurrió en una fiesta en 2016, cuando el hoy alcalde de Medellín era viceministro de Economía Digital del gobierno de Juan Manuel Santos. Un par de horas después, la cuenta de Twitter en la que fue publicado el relato pasó a ser privada y finalmente fue eliminada. 

La segunda acusación fue al día siguiente, miércoles 17 de junio. Por medio de una historia en una cuenta de Instagram, una mujer publicó algunos de los “pantallazos” de la primera denuncia y contó que, también cuando era viceministro, el alcalde frecuentaba un bar en Medellín donde ella trabajaba como mesera. Aunque no precisó los detalles, uno de los apartes de su publicación decía: “Yo también fui acosada por @quinterocalle”. 

Ese mismo miércoles, Isabel Escobar, corresponsal de W Radio en Medellín, logró contactar a esa segunda mujer y acordó una entrevista con ella para conocer su testimonio antes de publicar cualquier reporte sobre el caso. Para ello, concretó una videollamada en la que también participó Johana Fuentes, su jefa directa y editora de Regiones de esa emisora. 

Luego de esa conversación, Escobar estableció el primer contacto con la Alcaldía de Medellín por medio del secretario de Comunicaciones Juan José Aux, quien le respondió que las acusaciones eran graves y que requería dos días para darle una respuesta porque el alcalde seguramente necesitaría hablar con sus abogados. Sin embargo, minutos después el propio alcalde se comunicó con Johana Fuentes y le dijo que estaría dispuesto a salir al aire y dar su versión sobre las acusaciones siempre y cuando las periodistas consiguieran testimonios adicionales para demostrar que otras personas conocían de tiempo atrás esa denuncia. 

“Me dijo que era un ataque político, que querían destruir a su familia y querían destruir su nombre. Me mencionó a la hija y habló de todo lo que estaba pasando con su enfermedad. Al final me dijo que si conseguíamos otro testimonio que demostrara que ella (la mujer que habló con las periodistas de W Radio) no acababa de inventarse la historia, estaba dispuesto a salir al aire. Yo le respondí que no lo estaba juzgando, que ya tenía otros testimonios, pero que iba a conseguir más”, cuenta Fuentes sobre la llamada en la noche de ese 17 de junio, que duró cerca de 25 minutos. 

Sin embargo, el jueves en la noche Escobar trató de comunicarse de nuevo con la joven que dijo haber sido acosada por Quintero para acordar la hora de la entrevista, esta vez al aire, pero no le contestó mensajes ni llamadas. “Ese jueves, a eso del mediodía, yo había hablado con ella y seguía firme. Me dijo: ‘Si mi testimonio sirve para que otras víctimas se animen a denunciar y se desahoguen, yo lo voy a hacer’. En eso quedamos, pero después de esa conversación no nos volvió a contestar. De manera insistente tratamos de comunicarnos con ella en diferentes oportunidades y al mediodía del viernes nos dijo que estaba bien, pero que no iba a dar ninguna entrevista. No sabemos qué pasó”. 

En el intercambio de mensajes entre las periodistas de W Radio y el equipo de comunicaciones de la Alcaldía de Medellín, una fuente de la administración les dijo extraoficialmente que el alcalde ya había denunciado por “injuria y calumnia” a la mujer que iba a salir al aire en esa emisora. Consultamos la veracidad de esa información con el secretario de Comunicaciones Juan José Aux y con Felipe Morales, asesor en comunicaciones del alcalde. El primero no respondió a los mensajes ni a las llamadas y el segundo dijo que no sabía quién podía hablar oficialmente del tema. El martes 23 de junio logramos comunicarnos vía telefónica con Hilda Carvajal, abogada del alcalde, ella aseguró que devolvería la llamada, pero no lo hizo hasta el momento de la publicación de esta historia. 

Además, contactamos directamente a la joven que habló con las periodistas de W Radio después de publicar en sus redes que fue acosada por Quintero para indagar si había sido notificada de alguna acción legal en su contra o si algún funcionario de la Alcaldía o alguien en nombre del alcalde se había comunicado con ella. “No tengo comentarios, gracias”, respondió. También señaló que solo hablaría “cuando la autoridad competente” se lo pida. “Pero no con los medios ni con nadie que no sea una autoridad”. 

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“Seremos drásticos si se trata de falsas denuncias”

El 17 de junio, un día después de que se conociera la primera denuncia en redes en contra del alcalde Quintero por supuestos delitos sexuales, el mandatario respondió a un trino en que una usuaria de esa red le preguntó por el caso de dos mujeres que denunciaron públicamente haber sido abusadas sexualmente por la policía tras ser detenidas en una marcha universitaria el lunes 15 de junio. Quintero anunció que investigaría los presuntos abusos sexuales, pero señaló que sería “drástico” en caso de que fueran “falsas denuncias”. 

A las 7:17 p.m. del viernes 19 de junio la Alcaldía de Medellín envió a los grupos de WhatsApp en los que remite información oficial a periodistas un boletín titulado “Serían falsas las denuncias de mujeres que dijeron haber sido violadas durante las protestas en Medellín”. En ese comunicado, que estaba acompañado por un video, el comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, general Eliécer Camacho, dice que se hizo una “interlocución de socialización” con una de las denunciantes y agrega que la persona que denunció el caso usó mal algunos términos: “Que en ningún momento fue afectada sexualmente por parte de la Policía Nacional”, dijo en el video. 

Tres horas después, a las 10:14 p.m., el video del comandante de la Policía Metropolitana fue publicado en la cuenta de Twitter de la Secretaría de Seguridad de la Alcaldía de Medellín, pero además apareció con el término “promocionado”, lo que significa que la Alcaldía de Medellín pagó a esa red social para que su publicación tuviera mayor alcance. 

Contactamos a esas mujeres. Ambas pidieron que sus nombres no fueran publicados en esta historia, pero expresaron que no continuaron con la denuncia contra la Policía por temor. Debido a la presión que dicen haber recibido, una de ellas se retractó de dos palabras que usó en su denuncia pública: “abuso sexual”. Fue con base en esa retractación que la Policía y la Alcaldía de Medellín calificaron como falsas las denuncias, a pesar de que ambas mujeres insistieron en que fueron tocadas y agredidas sexualmente.  

Un padre ejemplar 

El jueves 18 de junio, la Agencia y Central de Medios de Telemedellín, dependencia que se encarga de la contratación de pauta para la Alcaldía de Medellín, se comunicó con el área comercial de Caracol Radio en esa ciudad para solicitar una ordenación de publicidad. Pero en lugar de una cuña o una pieza publicitaria, la solicitud consistió en que al día siguiente en el programa 11:00 a.m. conducido por Amalia Londoño, directora del Servicio Informativo de esa cadena radial en Antioquia, el entrevistado fuera el alcalde Daniel Quintero. El foco de la entrevista sería la faceta del alcalde como padre de familia. Fuentes de esa cadena radial nos confirmaron que la emisora se negó a esa solicitud por decisión de Amalia Londoño y sus jefes del Servicio Informativo en Bogotá. 

El pasado lunes, W Radio hizo públicos algunos de esos hechos. Según esa emisora, la oferta de pauta fue por cinco millones de pesos y, además de la entrevista en Caracol, debía incluir otra en la emisora Bésame. Luego, el secretario de Comunicaciones de la Alcaldía de Medellín publicó un comunicado en el que Telemedellín asegura que la solicitud a Caracol pretendía “que el alcalde enviara un saludo de felicitación a los padres en su día clásico” y promoviera mantener en esa celebración las normas de bioseguridad.  

El viernes 19 de junio Hora 13 Noticias, un espacio informativo transmitido por el canal regional Teleantioquia desde hace 26 años, publicó una nota de 43 segundos que fue colgada en su página web y en sus redes sociales. “El alcalde Daniel Quintero es un ejemplo de asumir el desarrollo de una ciudad entera al mismo tiempo de la crianza de sus hijas”, dice uno de los fragmentos de la voz en off que acompaña varias imágenes de apoyo del alcalde con su familia. 

Quanta Telecomunicaciones, empresa propietaria de Hora 13 Noticias, tiene en la actualidad un contrato de pauta con la Alcaldía de Medellín por 100 millones de pesos que empezó a ejecutarse el 26 de mayo y tiene vigencia hasta el 31 de octubre de 2020. Es, además, el segundo contrato de ese tipo que esa compañía suscribe desde que comenzó la actual administración. El primero fue firmado el 5 de febrero por un valor original de 80 millones de pesos, pero luego tuvo una prórroga y una adición por 40 millones de pesos.   

Consultamos a Fernando Cifuentes, director de Hora 13 Noticias, si el video en el que ese noticiero exalta al alcalde como un modelo de paternidad hizo parte de una ordenación de pauta por parte de la Alcaldía. Cifuentes aseguró que no fue una nota pagada y que se la pidió a una de sus periodistas después de que el equipo de prensa de la administración municipal lo contactó y le envió el material como una propuesta de contenido. “Lo consideré un contenido light que no tenía la fuerza para el noticiero y por eso pedí que lo hiciéramos para la página web y para compartir en redes. Sí me pareció una exaltación a la figura del alcalde, pero en ese momento no me generó ninguna suspicacia”, dice Cifuentes. 

El domingo 21 de junio las cuentas oficiales en Twitter de la Alcaldía, la Secretaría de Educación y la Secretaría de Seguridad publicaron un video producido por Telemedellín sobre la faceta de Quintero como padre y esposo. El Departamento de Gestión del Riesgo de Medellín (Dagrd) retuiteó el mismo video compartido en la cuenta personal de su directora. “Hoy le hacemos un homenaje muy especial a nuestro alcalde quien con su sencillez, amor y entrega por su familia es un ejemplo para la ciudadanía de cómo ser un superpapá”, dice el mensaje que acompañó el video en la cuenta de la Alcaldía.

La (no) respuesta oficial

Para su columna publicada el domingo sobre las acusaciones contra Quintero por violencia sexual, Las Igualadas solicitaron una respuesta del alcalde desde el viernes 19 de junio. El sábado, luego de varias horas de dilatar una entrevista que supuestamente les ofrecería, el propio Quintero le envió a Mariángela Urbina, vía WhatsApp, un documento PDF bajo “carácter de reserva” elaborado por su abogada, Hilda Carvajal. “Él nos envía ese documento y un enlace a una publicación en Twitter y dice literalmente que esa era la respuesta oficial”.

En sus trinos, el alcalde afirma que los testimonios de aquellas denuncias en su contra fueron publicados por “cuentas falsas” y que esos “ataques” no son contra él sino en contra de “sus tres mujeres”, en referencia a su esposa y a sus dos hijas. Aunque recibió respuestas de casi la totalidad de su gabinete adulando la relación que tiene con su familia, también recibió otras, como la de Ana Cristina Restrepo, periodista de Blu Radio y columnista de El Colombiano y El Espectador, quien le dijo: “Una ‘cuenta falsa’ está en contacto conmigo y teme hablar”. 

Constatamos que las dos mujeres que publicaron casos de violencia sexual por parte de Quintero existen, tuvimos contacto directo con una de ellas, conocemos sus nombres y los detalles de sus denuncias,  pero nos abstenemos de publicarlos por respeto a la decisión de ambas de no referirse al tema en medios de comunicación.  

Nuestro último contacto con la Alcaldía de Medellín para tratar de obtener una respuesta para esta historia fue el lunes 22 de junio, primero con el secretario de Comunicaciones Juan José Aux, luego con el asesor de comunicaciones Felipe Morales y finalmente con el alcalde Daniel Quintero. Ninguno respondió a nuestros mensajes y nuestras llamadas. 

La falta de respuestas oficiales*, las dilaciones al trabajo periodístico, las llamadas a los directivos de varios medios y la acusación que hizo Quintero contra Isabel Escobar al calificarla como “opositora política” contradicen la idea de respeto a los medios y a la libertad de prensa que el hoy alcalde defendió antes de llegar al cargo.

El 20 de septiembre de 2019 la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) denunció que el entonces candidato Quintero intimidó al periodista Óscar Morales, periodista del canal Telemedellín, luego de un debate con los candidatos a la Alcaldía: “Al parecer, una pregunta le molestó al candidato porque al terminar el debate se acercó al periodista y le dijo que le había hecho una pregunta malintencionada, pero que él iba a ser alcalde y que nunca se le iba a olvidar esa pregunta”.  

En diálogo con El Tiempo, en octubre de ese mismo año, Quintero dijo que ya se había disculpado con el periodista y había dicho que era respetuoso de los medios de comunicación. “Yo respeto la libertad de prensa, nunca me he expresado de forma violenta contra nadie en mi vida (…) Les dije que la libertad de expresión y la seguridad de los periodistas son muy importantes”. 

En 2013, cuando recién comenzaba su carrera política, también se refirió a la importancia de la prensa libre cuando afirmó que “las ideas no deben censurarse o prohibirse, deben discutirse con argumentos”.

* Horas antes de la publicación de esta historia el alcalde de Medellín publicó en sus redes sociales que el miércoles 24 de junio sería entrevistado en W Radio. 

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