25 de agosto de 2022
Hitos Urbanos, empresa de la que es accionista la hoy exvicecanciller y exvicepresidenta Marta Lucía Ramírez, tiene tantos negocios turbios como edificios. A la playa pública de la que se apropiaron en San Andrés, y el hotel de Cartagena que construyeron violando el POT, se suma la privatización de una reserva natural y la quebrada El Trujillo en el norte de Bogotá, recuperada y abierta como espacio público en 2009.
Ocurrió justo en la calle 127C Bis con carrera 6, donde Hitos Urbanos, en asocio con la firma Savegal Inmobiliaria, construyó Balcones de Bella Suiza (2012 a 2019). La constructora creyó oportuno talar indiscriminadamente parte del bosque, modificar el suelo incorporando un sendero peatonal en concreto y privatizar un espacio público para beneficio exclusivo de los habitantes de las tres torres que edificaron, algo que sin duda funcionó muy bien como gancho comercial para las millonarias y exitosas ventas del proyecto.
Lo hicieron levantando una malla que impide el paso de los ciudadanos que, anteriormente, podían transitar libremente por esa extensa reserva natural que comunica, a través de uno de los caminos más cortos, con el embalse San Rafael. Fácilmente, el cerramiento de la quebrada El Trujillo podría entenderse como si hoy de repente sucediera lo mismo con la renombrada quebrada La Vieja, ubicada en el exclusivo Rosales, del nororiente de Bogotá.
Para varios habitantes del sector, la construcción de Balcones de Bella Suiza podría estar asentada sobre una posible zona de alto riesgo, dada su cercanía a tubos principales de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá.
La denuncia de los vecinos
Gustavo Mantilla es el presidente de la Junta de Acción Comunal de El Pañuelito, ubicado en el sector de la calle 127C, un barrio vecino de la quebrada El Trujillo. En conversación con Vorágine, explicó que hace 50 años, antes de que se urbanizara el sector, la quebrada tenía un gran caudal de agua limpia que abastecía los barrios aledaños, pero en los últimos años ha sido contaminada con residuos de construcción.
Sobre el edificio de Hitos Urbanos, dijo que él y muchas otras personas reclamaron el porqué se estaba entregando una licencia que no se debía entregar. “Todo el mundo reclamó pero las autoridades nunca hicieron caso porque dicen, no me consta, que uno de los dueños o socios era la exvicepresidenta de Colombia”, asegura Mantilla.
El presidente de la junta de El Pañuelito explicó que “lo que hicieron sobre la quebrada: zona de parque, puente, fue muy bonito, muy agradable a la vista, pero cerraron el paso a un sendero que era peatonal y se utilizaba para subir a La Calera. Ahí ya se cerró eso, que no era una propiedad privada sino una reserva, lo han ido acabando ellos. Me dijeron que era por medida de seguridad porque ahí vivía gente muy importante y se prestaba para cualquier atentado por el lado del monte”.
La oposición que hizo Mantilla a la privatización de ese sendero resultó en su contra. “La única piedra en el zapato éramos algunas personas que nos habíamos comprometido a velar por la quebrada El Trujillo. Teníamos una mesa de trabajo pero sutilmente nos dijeron que no jodiéramos. Aquí se mide quién es el denunciante, era David contra Goliat, no había nada que hacer”.
Recuerda, incluso, que alguna vez un comandante de la Policía les recomendó que no continuaran con esa lucha. “Que la gente podía caminar una cuadra más y subirse por la calle 127, que no nos pusiéramos a pelear por eso. De frente me han dicho «quedese calladito que se ve mejor». Me llamaron y me dijeron que me quedara callado, ¿Quién? sabe Dios. Fueron varias llamadas anónimas. Alguna vez la policía me amenazó, llegando a la Séptima se me atravesó una moto y el policía se bajó y me dijo que conocía muy bien mi familia, que me quedara callado”.
Vorágine le preguntó a la Alcaldía de Bogotá sobre la malla que construyó Hitos Urbanos. La respuesta confirma que esta constructora sí privatizó la quebrada y el camino a la reserva natural: “En cartografía y ortofoto sí parece haberse construido sobre el Corredor ecológico de ronda de la Quebrada Trujillo, delimitada desde el POT”. También aclaró que hasta la fecha no hay ningún sancionatorio ni proceso penal, pero ya programaron una visita para revisar el estado de la quebrada. “Debe haber intervenciones de curaduría, gobierno y Distrito. No encontramos evidencia de que las haya habido”.
Una obra de arte
Pero eso no es todo. Además de la usurpación de estos recursos naturales, múltiples contravenciones y otras irregularidades en la licencia de construcción, Hitos Urbanos afectó la casa del reconocido artista plástico peruano-colombiano Armando Villegas, fallecido en 2013. Hoy su familia reclama por los daños ocasionados a la casona, que en sí es una obra de arte que el mismo maestro diseñó.
Esta casa, que está pensada para ser un museo y un espacio cultural, tuvo grandes afectaciones por la construcción de Balcones de Bella Suiza. Al parecer, Hitos Urbanos pretendía aburrir a la familia Villegas Guerrero para apropiarse de un predio invaluable y construir más torres de apartamentos en ese lugar.
Como no lo lograron, a la fecha pretenden no responder por los daños causados, asegurando que es culpa de la familia por no haber permitido levantar el acta de vecindad, esto es, un documento requerido en el que queda plasmado el estado de un inmueble vecino colindante previo a iniciar una construcción; debe incluir un registro fotográfico y videográfico completo de toda la propiedad.
La familia Villegas Guerrero nunca se negó a levantar dicha acta, solo le solicitó a la constructora firmar un acuerdo de confidencialidad por razones de seguridad. Hitos Urbanos se opuso y la familia, para salvaguardar su privacidad e integridad, tampoco firmó el acta.
Gustavo Petro, en 2018, hizo un mea culpa de algo que le faltó por hacer en su alcaldía: “en esta idea fracasamos”. En un trino del 29 de diciembre, dijo que quiso convertir la casa del Maestro Villegas en un museo en Usaquén, en el norte de Bogotá: “La casa de Villegas fue ideada por el mismo maestro”.
¿Quién fue el Maestro Villegas?
Armando Villegas López era un artista plástico, pintor y escultor que murió en 2013 a sus 87 años. Fue profesor en dibujo y pintura, maestro en pintura mural. Fue uno de los pioneros del arte abstracto en Colombia y el precursor del realismo fantástico; reconocido por sus icónicos coloridos retratos de personajes imaginarios, con fuertes influencias prehispánicas y coloniales, rodeados por faunas, floras y detallados micro fondos fantásticos. Integró a finales de los años 50 junto a Fernando Botero, Eduardo Ramírez Villamizar, Alejandro Obregón, Enrique Grau y Guillermo Wiedemann la denominada élite del arte moderno que introdujo la contemporaneidad artística a Colombia. Fue director de la Escuela Nacional de Bellas Artes de la Universidad Nacional de Colombia; docente en las universidades Javeriana y de Los Andes.
Tanto Colombia como Perú le otorgaron notables reconocimientos y varias distinciones por sus aportes a la cultura y la pedagogía; además fue gestor cultural. En 2013 se convirtió en el segundo pintor latinoamericano nominado a un Premio Príncipe de Asturias en la categoría de arte. Realizó más de un centenar de exposiciones individuales y participó en múltiples exposiciones a nivel nacional e internacional. Con una carrera artística y un proceso creativo de más de 60 años se le considera uno de los maestros más prolíficos y polifacéticos de su generación; una figura representativa dentro de la plástica latinoamericana de nuestros tiempos.
Vorágine le escribió a Juan Camilo Ochoa, gerente de Hitos Urbanos, pero este ignoró nuestros mensajes.