13 de julio de 2022
Nova Lorena Cañón es relacionista pública, nació en Villavicencio y tiene una oficina de comunicaciones desde 1999. Fue capturada por el caso de ‘Las marionetas’: un grupo delincuencial organizado dirigido por el senador liberal Mario Castaño, diez de ellos hoy en la cárcel, que se dedicaba a la cooptación irregular de contratos del Estado.
Después de ser capturada, Cañón firmó un preacuerdo con la Fiscalía General para entregar información relacionada con su rol en la red de corrupción. En el relato destaca la historia de cómo la mamá del presidente Iván Duque habría participado en el tráfico de influencias que Nova Lorena impulsaba como lobbista.
La relación entre Nova Lorena y Juliana Márquez empezó cuando recién había sido elegido el presidente Iván Duque; se conocieron en la peluquería de Germán Palomino, donde Nova Lorena se desempeñaba como comunicadora. Juntas empezaron a realizar gestiones para entregar donaciones de empresas y particulares en varios municipios del país.
Las dos coordinaron, por ejemplo, una donación de instrumentos en Boyacá, y una visita a La Chamba, Tolima, para dar visibilidad a la vajilla negra, que después recibió la denominación de origen artesanal por parte de la Superintendencia de Industria y Comercio. Cuando empezó la pandemia gestionaron donaciones de alimentos en Bogotá y otros departamentos. Juliana Márquez viajaba por el país haciendo donaciones y Lorena Cañón, en su rol de relacionista pública, escribía notas con el enfoque puesto en “la mamá del presidente Duque en las regiones”.
En las donaciones estuvo involucrada Nubia Celis, una empresaria que donó violines para los niños de Boyacá. A su vez, Celis tenía un socio de nombre Pablo Gómez que se presentaba como familiar del senador Mario Castaño y que se interesó en conocer a Nova Lorena por su relación con la mamá del presidente Duque.
Pablo Gómez, que no se encuentra entre las personas capturadas, ha sido ampliamente mencionado en el proceso judicial de ‘Las marionetas’. Se encargaba de cobrar y recibir dinero proveniente de la adjudicación irregular de contratos del Estado y se reunía con funcionarios con quienes pactaba porcentajes por las gestiones que realizaba el grupo delincuencial. Según el relato de Nova Lorena, Pablo Gómez fue quien le presentó a Mario Castaño en 2019 por el mismo motivo: su cercanía con Juliana Márquez.
“Ahí llegó el senador, me saluda, me dice que qué bueno conocerme, que Pablo le dijo que yo era cercana a la mamá del presidente, que qué bueno, que también le había contado que había conseguido muchas donaciones y que le gustaría que trabajáramos”.
En su declaración ante la Fiscalía General, Lorena Cañón repitió como un mantra que la señora Juliana Márquez no sabía nada sobre el pago que recibía por las gestiones que realizaba de la mano de Mario Castaño. Lo que sí reconoció la relacionista pública es que en su trabajo como lobbista aprovechaba su cercanía con la mamá del presidente Duque para facilitar los procesos de contratación ante distintas entidades estatales. El resultado era la aprobación de proyectos por los que Nova Lorena, el senador Castaño y otras personas se beneficiaban económicamente.
Cañón cuenta que en abril de 2021 conoció al alcalde de Armero-Guayabal (Tolima), Medardo Ortega Fonseca, por intermediación de Mario Castaño. En esa reunión, Ortega le propuso a ella quedarse con 5 puntos, es decir, el 5% de un proyecto que había presentado ante el Ministerio de Salud para conseguir una ambulancia. Su trabajo era hacer el lobby.
“A la semana siguiente, posiblemente mayo de 2021, compré una artesanía para el doctor Correa -tiene un cargo en el Ministerio de Salud pero no sé cuál- y lo comuniqué con la señora Juliana Márquez para tocar dos temas importantes, uno la ambulancia de Armero- Guayabal y otro para el puesto de salud de La Chamba, Tolima. Lo que desconocía la mamá del presidente era que el alcalde de Armero-Guayabal, Medardo Ortega, por instrucción del senador Mario Castaño debía pagarme 5 puntos de lobby”.
En medio del interrogatorio, la Fiscalía le preguntó a Nova Lorena Cañón si ella “adujo la calidad de asesora de la señora Juliana Márquez para trámites que ella desconocía” a lo que respondió de forma afirmativa. Sin embargo, también reconoció que la participación de la mamá del presidente no se limitaba a servir de referencia.
“Solamente ante la DIAN ayudé a una persona a ingresar. Más o menos en el segundo semestre de 2022 me entrevisté con Gabriela Barriga, secretaria general de la DIAN, la cual se comunicó con Juliana Márquez mediante videollamada desde mi celular, se saludaron y posteriormente por autorización de Juliana se enviaron unas hojas de vida ya que había unas vacantes en las entidades”. (La fecha incluida en esta cita fue transcrita tal cual como aparece en el documento de la Fiscalía).
Según el relato de Nova Lorena, Juliana Márquez tenía conversaciones con funcionarios que después, gracias a esa intermediación, cedían a sus intereses y en general a los del grupo delincuencial organizado. Incluso en los registros de llamadas por los que indagó la Fiscalía se refieren a Juliana Márquez como “la jefa” y “la madrina”.
En una conversación que la Corte Suprema de Justicia incluyó en la imputación de cargos contra Mario Castaño, Nova Lorena Cañón habla con Pablo Gómez, otra de las personas al servicio del senador, y se refiere a unas ganancias que obtuvieron gracias a “la gestión de la madrina”.